Desde hace años que escucho que en las escuelas en vez de enseñar ingles deberían enseñar Chino, cosa que parece, además, sensato, ya que si se piensa en el mercado Chino y en el norteamericano, los millones de habitantes de ese país son indiscutibles.
Como mercado comercial, China es como el vellocino de oro.
Estoy de acuerdo con eso y me sumo a la propuesta, a pesar de protestar diariamente con los productos chinos, que admitámoslo, además de invadir el mercado, imitar diseños y marcas, tienen unos productos malísimos.
Sin embargo, hasta en eso se los puede excusar, precisamente ese mercado es inmediato y de recambio inmediato también, nada está hecho para que dure, sino para incentivar el consumo, no sé mucho sobre recursos y no entiendo qué le provoca ese permanente flujo de hacer lo mismo de nuevo una y otra vez al planeta, pero me pregunto qué funciona en ese modelo.
Para empezar, soy de la prehistoria, en la que veníamos con otras ideas, las cosas tenían que ser buenas y durar, así que tenemos que ser cuidadosos con ellas, en cambio, ahora, el mercado se ha dado cuenta que es al revés hay que usar y descartar, así se renueva todo y se “mueve el mercado”.
Algo más extraño aún es que mientras en nuestro país, se habla de aprender Chino para hacer negocios, y pareciera que esperamos ese momento, otros mercados están abriéndose hacia Oriente, pero no para dejar pasar mercadería de ínfima calidad, sino para colocar las buenas mercaderías locales.
Chile y Perú, ya están en etapas de consolidación empresarial, y ya llevaron a cabo convenios jugosos para esos países.
Tanto el presidente peruano, como el Chileno, se metieron de lleno para concretar esa agenda y lo lograron.
No es sólo una cuestión de negocios rentables, sino también de transcultura, de conocimientos, de compartir manufactura moderna y de mejor calidad.
Parezco una propaganda de Chile y Perú, pero no puedo dejar de notar que mientras nos la pasamos leyendo sobre las visitas de la presidenta a ese país, para generar lazos comerciales, otros países, sin tanta prensa y económicamente menos activos, como en el caso de Perú, ya tienen el mercado a su disposición.
Hay indicadores interesantes, como que Perú tiene cosechas de productos en época más tempranas que en Chile, y por ello, mejores oportunidades que ese país con ciertos productos.
Y nosotros: ¿acaso no tenemos todos los climas?, ¿qué hacemos con ello?
Especialmente en el área de agroexportación, cómo puede ser que esos países, sin esperar a aprender el Chino, ya estén en la carrera de ganarse esos mercados.
Argentinos, menos futbol y más expedición.
|